Todo comenzó en el Gran Premio de Corea, en el nuevo trazado que se estrenaba aquél 24 de Octubre. Una carrera caótica, una lluvia torrencial que provocó el parón de la misma durante una hora prácticamente. Tras la reanudación, Mark Webber, el entonces líder del campeonato, pisaba la hierba (o más bien dicho el barro) mandándolo directamente contra el muro. Primer golpe de teatro de aquella tarde en Yeongam, 8 de la mañana en España.
Las vueltas iban sucediéndose, y a falta de 10, el Red Bull RB6 número 5 de Sebastian Vettel, era rebasado por el Ferrari F10 pilotado por Fernando Alonso en la primera curva. Justo después, en la primera recta de atrás, el de Red Bull aparcaba su monoplaza donde pudo a causa de lo que parecía una rotura mecánica. Segundo golpe de teatro. Los dos abandonos de los pilotos de Red Bull, hacían que Fernando Alonso, regresara al liderato del mundial 2010 de Fórmula 1 6 meses después. La felicidad era palpable en el box y el motorhome de Ferrari, y los aficionados españoles, incrédulos, radiantes de felicidad, veíamos la tercera corona más cerca que nunca. No nos lo imaginaríamos, pero aun quedaban más golpes de teatro.
7 de Noviembre, circuito internacional de Interlagos, Sao Paulo. Gran Premio de Brasil. Primer match ball. Mientras los aficionados españoles y los tifosi ferraristas echábamos cuentas de lo que necesitaba hacer fernando y sus rivales para sentenciar el mundial, un sorprendente Nico Hulkenberg se marcaba una pole del todo inesperada, una pole para el equipo de grove que no salían en primera posición desde el gran premio de Europa 2005. En parte gracias a la lluvia, Nico se convertía a priori en el juez del campeonato. Lo que realmente se convirtió, fue en chicane móvil para sus inmediatos perseguidores. Mientras Vettel y Webber se lo quitaban de en medio con una relativa facilidad, Fernando, que salía en P5 tenía que vérselas con Hamilton primero, y luego con el vencedor de la GP2 en 2009. A la postre le sirvió para alejarse de los Red Bull y acabar en tercer lugar. La celebración tenía que esperar, aunque, la segunda posición del segundo en la clasificación, Mark Webber aumentaba el optimismo en el aficionado ferrarista y español.
Pero para lo que a muchos se nos pasó por alto, otros se percataban de ello. Sebastian Vettel, con muy pocas opciones al título, se imponía a quien tenía mas opciones y a priori era el único capaz de quitarle el liderato al español; Mark Webber.¿ Por qué razón Red Bull no ordenó a Vettel dejar pasar a su compañero, y asi poder recortarle 7 puntitos mas? ¿Era por no tener que usar las ordenes de equipo que siempre criticaron a Ferrari? ¿Daban el título por perdido?
Esas y otras más eran las preguntas que se formulaban periodistas, pilotos, mecánicos de otros equipos, y en general los aficionados del mundo de la Fórmula 1 en general.
Pero, ¿qué pasó realmente en el seno de Red Bull?
Continuará...
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